Sus directores artísticos, Ana Vallés y Baltasar Patiño, fundan la compañía en el año 1986 en Compostela, donde también son promotores de espacios de exhibición para la creación contemporánea:
En 1993 y hasta 2008 crean y gestionan el Teatro Galán, espacio destinado a la programación y difusión del teatro y la danza contemporáneos en Galicia. Entre 1993 y 2005 el Teatro Galán fue destinado a la programación y creación, con más 1.300 actuaciones realizadas. Y de 2005 a 2008 se destina únicamente a la creación y residencias artísticas
De 1995 a 2007 impulsan el Festival Internacional de Danza en espacios urbanos En Pé de Pedra.
En 2017 crean un espacio in-permanente de exhibición, la saLa Montiel, , independiente de presupuestos y normativas oficiales.
Han puesto en escena más de 30 espectáculos, incontables performances, y propuestas en formanto concierto, con los que ha alcanzado más de veinte premios y menciones en distintos puntos de España y Europa.
Los espectáculos de Matarile y Ana Vallés se han presentado en ciudades de otros países como: Boston, Belgrado, París, Novisad, Porto, Leipzig, Boloña, Dresden, Edimburgo, Almada, Bayonne, Bucarest, Rennes, Dinan, Douardenez, Lanester, Brasilia, Tavira, Varsovia, Viana do Castelo, Cluj-Napoca, Timisoara.
TEATRO, DANZA, PERFORMANCE
Pequeño y Medio FORMATO
#NuevosLenguajesEscénicos
#multidisciplinar
#teatro #danza #música
En el principio fue el caos.
Después, con Celeste y Claudia, C y C, llegaron las tentaciones.
El (re)conocimiento de Celeste y la fantasía de Claudia.
Dice Roy Andersson que el plano general, el espacio que rodea a una persona, dice más de ella que su propio rostro.
Cómo consideraremos aquí el cuerpo, como primer plano que acompaña al rostro y conforma el prejuicio de un estereotipo? O como parte del plano general que define una forma de estar y habitar?
El diablo paseándose en bicicleta por las calles vacías, como ángel custodio sin cuerpo que acompañar.
El errante que se equivoca y el errante que vaga sin sentido.
Reunir a Claudia y a Celeste es como convocar al ángel y al demonio, sin intentar definir quién es qué, quién es quién, o en qué momento son intercambiables.
Una coproducción de Matarile con AGADIC y Xunta de Galicia. Colaboran Concello de Santiago y Ártika de Vigo.


TEATRO, DANZA, PERFORMANCE
Sala gran FORMATO
#NuevosLenguajesEscénicos
#multidisciplinar
#teatro #danza #música
ESTRENO ENERO 2022 - Teatro María Guerrero
Que alguien encienda la luz. Que nadie duerma.
A lo que hemos dado en llamar espacio le hemos puesto límites. Pero no hay límites en la luz.
Sin caer en el optimismo impenitente de Zizek ni machacarnos alegremente pensando que el mal nos hace mejores ¿es posible al menos una transfiguración, un alterarse (convertirse en otro), tomar distancia y mostrar la verdadera cara, el verdadero rostro?
In loca, libremente del latín: lugares a donde.
Y todo junto, inloca: no loca. Un adjetivo inventado para negar la locura (¿nunca loca?) Lo que no supondría cuerda, y menos aún, razonable.
La decisión de entrar en lugares, de franquear una puerta, de rasgar el paraguas que nos protege del caos. La tentación insatisfecha, el deseo perpetuo. No existen los límites, no se llega a ningún lugar o estado. Entramos, pero no llegamos.

El diablo en la playa
Lucifer, el portador de la luz. El ángel más bello del cielo que, por desafiar el poder creador de Dios, es condenado. El ángel caído.
El paraguas de Deleuze
La lucha contra el caos. Ante el que la ciencia y la filosofía crean un paraguas protector, mientras que el arte abre grietas, fisuras por las que se filtran el caos y la luz.
a habitación de Tarkovski
La luz como espacio, creadora de atmósferas, temperaturas, apariciones o lejanía. La luz para habitar o difuminar. Las relaciones fantasmales.
El vientre de la vieja
La capacidad de crear. Desde un vientre, desde una cabeza, desde una sensibilidad, de los que no se espera nada nuevo. Un lugar desde el que es posible plantearse preguntas y, quizás, tantear alguna respuesta. El gran regalo, una epifanía.
El traslado del cadáver
A dónde llevarlo, qué espacio encontrar para nuestras ruinas, las ruinas de la vieja Europa que, como dice Agamben en Cuando la casa se quema, les hemos puesto tantos parches y les hemos dado tantas capas de pintura, que parecen intactas.
La forma del cerebro
A partir de Europa tiene la forma de mi cerebro, de Cartarescu. El pensar compartido. Pero también una sensación generalizada de acabamiento, de final de una civilización (el último de los axiomas de Steiner para definir La idea de Europa).